Bocadillo de filete con cebolla caramelizada y queso
Nadie se puede resistir a la combinación clásica de cebolla dulce y filete. Con capas extra de queso Maasdam, mayonesa, mostaza, pepinillos y rúcula, este bocadillo garantizarán distintos sabores y texturas con cada bocado.
2 cebollas grandes
1 cucharada de aceite de oliva (más un chorrito para el filete)
1 cucharada de azúcar moreno
1 cucharada de vinagre balsámico
250 g de filete en una pieza (solomillo)
Una pizca de sal marina
Una pizca de pimienta negra (al gusto)
1 hogaza pequeña de pan
1 cucharadita de mostaza de Dijon de grano
1 cucharada de mayonesa
2 lonchas de queso Maasdam Frico
2 cucharadas de pepinillos picados
2 puñados de rúcula
Para preparar la cebolla caramelizada, cortar las cebollas blancas en medios aros. Añadir una pizca de sal. Calentar 1 cucharada de aceite de oliva en una sartén grande y cocinar la cebolla a fuego muy lento, hasta que se ablande (unos 15 minutos). Añadir el azúcar y el vinagre balsámico, y dejar que se caramelice durante 15 minutos más, hasta que quede pegajosa y con un bonito color marrón. Vigilar las cebollas durante esos 30 minutos y remover de vez en cuando. Apartar.
Sazonar el filete con sal y pimienta y añadir un chorrito de aceite de oliva.
Calentar una sartén a fuego alto y colocar el filete en el centro de la sartén. Cocinar durante 3 minutos si se quiere la carne poco hecha, 5 minutos para cocinarla al punto y 8-9 minutos si la carne se quiere bien hecha. Sacar el filete de la sartén y dejarlo sobre una tabla de cortar durante unos minutos.
Abrir el pan. Untar la parte inferior con mostaza y mayonesa. Añadir lonchas de queso Maasdam Frico (cortadas en triángulos) Colocar los pepinillos encima. Añadir 2 puñados de rúcula.
Cortar el filete en tiras. Colocar el filete y su jugo en el bocadillo y terminar con la cebolla caramelizada. Colocar encima la parte superior del pan y presionar suavemente. Cortar por la mitad y servir con patatas fritas.